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vicenteperu

MI HABITACIÓN

MI HABITACIÓN

Yo sé que hay que tener mente amplia, que el que siembra tacañamente, tacañamente cosecha y el que siembre generosamente, generosamente cosecha; pero me gusta una habitación pequeña, que cumpla las necesidades y punto. Seguramente en el substrato de este deseo esté algo de la humildad y de la pobreza, pero no creo que mucho, porque al final tienes algo pequeño, pero con todo lo necesario y en cuanto aparece la frase, todo lo necesario, ya se ha fastidiado lo de la pobreza.

En el fondo también hay una idea congelada de mi juventud. En alguna temporada veraniega de marchas a la sierra de Madrid, me di cuenta que eso de dormir en el campo es un incordio: el suelo está duro y por la noche te despiertas muchas veces, también se te llena la comida de hormigas, el sentarse en el suelo es mucho más incómodo que sentarse en una silla… por eso, para estar a gusto se podía avanzar hacia dos extremos: tener de todo y llevarte una mochila enorme, con ruedas, o no necesitar de nada (aguantarse con lo mínimo) y llevar una mochila pequeñita. No es posible llegar a ninguno de los extremos, por yo opté por el de no necesitar de nada.

En algún momento estuve en un ambiente que utilizaba el P. Pozo en el albergue de Circa de Mejia. Su cuarto de baño (independiente) era bien pequeño y sin plato de ducha. El agua de la alcachofa caía en el suelo, incluida la taza del inodoro y algo del lavabo, porque todo estaba muy junto. Eso me gustaba.

Ahora vivo casi siempre en Arequipa y, como les voy a contar, he llegado a algo de esto. Me da la impresión de que me estoy pasando de lo sensato y pronto tendré que cambiar a una habitación grande y además me temo que la siguiente que ocupe va a ser la mejor de la casa.

Aquí el terreno es barato y las habitaciones suelen ser bien amplias. Yo vivía en una de ellas (sin servicio) cuando un chico de los que se guiaban con migo piensa venir a probar si lo suyo era la cruzada. Era de familia humilde y es muy peligroso que el ser cruzado suponga una forma de “progresar” en la vida, así que pensé llevarle a una habitación de un grupo de tres, que son muy pequeñas y sencillas, y que nadie habita salvo necesidad. Pero si él se va a una habitación pequeña, no me voy a quedar yo en una grande, y me fui a otra de las enanas. Luego él no llegó a venir y yo me quedé aquí tan contento. La amplia ventana y la puerta dan a un patio interior grande y sin edificios en frente. Como casi tengo igual de cerca la manilla de la puerta que la de la ventana, cuando tengo que abrir algo para la ventilación, abro la puerta. Tengo un armario de plástico, una estantería de 0,90 por 1,70 la mesa, la silla y la cama. Además puedo echar la silla para atrás para levantarme de la mesa sin que choque con nada. Antes si que chocaba con la cama, pero ahora me he buscado otra más estrecha, una de esas plegables, de 0,90 de ancho, que dejo siempre extendida y todo me queda sin ningún problemas de espacio.

Pero la cabra tira al monte y yo también. Para la calefacción uso un secador de pelo y en cuanto tenga tiempo pego en la ventana otro cristal, con silicona, para tener doble vidrio y que se vaya menos el calor. En la blanca pared, un poster de la Virgen de Guadalupe (¿Acaso no estoy yo aquí, que soy tu madre?) y otro del Machu-picchu. Por aquello de la importancia de la amistad, en el cristal de la ventana tengo una postal de Navidades de un amigo, junto con una foto manuscrita del Padre y otra de la Virgen de Écija.

La foto es de mi habitación. Está tomada desde la puerta y se ve la mesa con su lap-top, la cama y la estantería con muchos huecos. A la derecha un afiche (cartel) de la Virgen de Guadalupe, con su frase: "¿y no estoy yo aquí, que soy tu madre?"

1 comentario

MANUEL GUILLEN -

Muy interesante, aunque no me sorprende tu estilo de vida.
Sinceramente no podría decir que te envidio, pero creo que es la filosofía correcta. La austeridad.
Pero no te preocupes por tener algo más de lo justito, porque si se estropea algo, no te puedes quedar parado y conviene tener algo que lo sustituya para seguir con la actividad...
Además en tu caso lo que tienes lo utilizas fundamentalmente para ayudar a otra gente. "Pos" ándele y no te apures.
Un abrazo muy fuerte.