Blogia
vicenteperu

MI OBISPO

MI OBISPO

Después de unas largas “vacaciones de no escribir en el blog” me pongo al ordenador para contaros las últimas.

En primer lugar deciros que estoy asombrado de lo poco que me rinde el tiempo. Ahora estamos quince días de vacaciones porque aquí es la mitad del curso. El 28 y 29 de julio son las Fiestas Patrias, cuando se independizaron estas tierras y aprovechan para quedarse unos días más de descanso. Pues aunque estoy jubilado y trabajo muy poco, no sé cómo me las arreglo pero tengo muchas cosas atrasadas. En España tenía mi jornada laboral de profesor y hacía algo parecido a lo que haga aquí con dos horas semanales de astronomía y unas cuantas de apoyo en temas de religión de un instituto. Espero que estas limitaciones me sirvan para crecer en humildad.

El miércoles pasado hice una minicaminata de una mañana a Sabandía, sito en el que he estado por lo menos tres veces. Pasado mañana empezaremos unas convivencias de tres días de iniciación al apostolado, en el famoso barrio de San José de Tiabaya, donde muchas veces ha colaborado la Milicia y nuestra ongd: GAM. Pero eso os lo contaré en la próxima.

Ahora quería haceros una reseña de nuestro obispo. A mí me parece que es estupendo. La primera vez que le oí fue en la Misa de inauguración de curso de un colegio. Habló de forma muy directa y diciendo cosas interesantes y se metía con los alumnos pasotas, incordiándoles con un estilo muy parecido al mío, que evidentemente es el que a mí me gusta.

Este fin de semana ha habido un encuentro de jóvenes de la diócesis y la inauguración corrió a su cargo. Les dijo varias veces que les quería y compartió con ellos sus preocupaciones de pastor.

Durante su charla nos explicó cómo, según diversas encuestas, la juventud, sobre todo la adulta, no cree que el hombre pueda ser feliz. Por tanto, sólo aspira a pasar la vida cómodamente y a conseguir el sucedáneo de la felicidad que es la diversión y el placer. El demonio interviene aumentando la dosis de escepticismo frente a la felicidad y a las capacidades humanas en este sentido, haciendo creer que no merece la pena fiarse de Dios, pues aunque te fíes de Él y le sigas, no puedes conseguir la felicidad.

Luego nos puso su propio ejemplo, que de pequeño era claramente practicante y a los 15 años dejó de creer, porque llega a ese convencimiento de que no puede ser feliz y porque ya tiene los pecados de la impureza. Pas después de la indiferencia a ser  anti Dios. Humanamente tiene éxito en la vida. Es abogado con doctorado, gana mucha plata y dos casas, tiene una novia y otra de repuesto, se divierte, pero sigue sin ser feliz. En esa tesitura, a los 27 años, le cambia Juan Pablo II. Fue de viaje pastoral a Lima y toda la ciudad  se colapsa durante unos días, centrada en el recibimiento. Él huye de su enemigo y del follón y se va a pasar unos días a un hotel de las afueras, con diversión incluida. Hay un instante en el que enciende la tele y ¡ZAS! aparece la cara del Papa y piensa: ¡este sí que es feliz! ¡Existe la felicidad, por lo menos una persona la tiene! ¡Yo quiero ser como ese!… y se “reconvierte”.

Pasa por diversos estadios y desde los Neocatecumenales (los Kikos)  pasa a su seminario. Juan Pablo II, le ordena y después le elige para obispo. Ahora, al menos aparentemente, es un hombre feliz que tiene problemas y dolores, pero por dentro sigue contento.

Habló de algunas cosas más, de forma muy alentadora, aún para los que están hundidos en la miseria y el pecado, Para salvarse, hay que desearlo, pedírselo al Señor y poco más, que Él hace el resto. Algo muy parecido a la mística de las miserias de Abelardo.

Siempre afable, jovial, directo y con mucho “gancho”. Hay gente estupenda por el mundo. Demos gracias a Dios.

Para terminar decir que se confirma que iré a darme una vueltecita por España. Del 20 de septiembre al 5 de octubre estaré con unos siete militantes mayores de aquí participando en la celebración del centenario del nacimiento del Padre Morales. Luego que quedaré hasta el 14 en Burgos, con las revisiones médicas rutinarias y disfrutando de la amistad, que es un regalo de Dios.

Un abrazo y hasta pronto.

 La foto corresponde al campamento de Gredos, sitio donde estuve muchos años intentando aproximarme al Seño en su naturaleza

2 comentarios

Ricardo -

Guardate un ratito para el Grupo Mas para cuando vengas. Ah, hemos pintado todo el hogar de verde. NO, es broma. Un abrazo

Gonzalo -

Hola Vicente!. Cómo alegra saber que te vas a pasar por aqui. Un abrazo muy fuerte